Comprendiéndolo como “Entrenamiento Uno x Uno”, el Coaching está orientado al desarrollo de las competencias, entendidas éstas como el conjunto de conocimientos, habilidades y actitudes. Dicho entrenamiento, apunta a mejorar la efectividad de una persona en su rol, optimizando la capacidad aplicada a las tareas asignadas.

Haciendo foco en el desempeño, pretende abordar las dificultades en el trabajo cotidiano, elaborando certeros planes de acción que permitan al Coachee superar los estándares de performance requeridos por la organización.

Desarrollar un Equipo de Trabajo, implica repensar el accionar del equipo en tres dimensiones: la calidad de los vínculos entre las personas que lo integran, la efectividad de los procesos de trabajo y la maximización de resultados.

Haciendo foco en estas dos dimensiones, los programas de consolidación de Equipos Directivos procuran hacer foco en:

• Evaluar el Desempeño del Equipo;
• Identificar Aceleradores y Frenos para el Crecimiento del Equipo;
• Detectar Oportunidades y Áreas de Mejora Clave;
• Generar un Espacio propicio para Compartir las “Mejores Prácticas”;
• Definir Estrategias y Establecer Planes de Acción;
• Realizar Seguimiento y Retroalimentación del Proceso.